viernes, 26 de octubre de 2007

Cansada, sucia y dolorida

taxipaís con la asociación de jóvenes de la Asociación Africanista Manuel Iradier
Iniciando el viaje

Completamente cubiertas para evitar el polvo del camino en un taxipaís en Guinea Ecuatorial
Al final Avilla me preguntó cómo ponerse el pañuelo para taparse la boca. Todavía tengo polvo en las gafas y a la camiseta le costó recuperar su color.

Kogo 22/08/07

Ya de vuelta en casa. Me duele todo y tengo la sensación de que sigo estando sucia.

Al final fin de semana ha ido bastante bien. El grupo se medio enfadó una noche buscando sitio para cenar, porque somos muchos y cada uno quería hacer lo que quería, pero no llegó a más. El resto del tiempo han estado bastante organizados, excepto hoy. Hemos llegado a Bata y teníamos un rato libre, así que les hemos dicho que podían aprovechar si tenían que hacer algún recado pero que había que estar a la hora para volver a Kogo. Han aparecido cuando han querido, y lo peor es que nadie se ha sorprendido.

La actuación salió muy bien. Habían preparado vestuario y atrezzo y tenían mucha ilusión. Algunos días les habíamos tenido que dar un toque de atención para que se lo tomaran más en serio, para que fueran al ensayo, para que se responsabilizaran del material... Pero esta vez sin duda les hemos felicitado.

Así que una vez terminado el trabajo todos de vuelta a la ciudad para dormir y esta mañana cargar la furgoneta y volver a casa.

A la ida fui todo el trayecto dentro de la cabina para intentar llegar más o menos limpia y más descansada, y ya me fastidiaría de vuelta, que ya regresaba a casa, con baño, ropa limpia, mi cama y demás. Ha sido terrible. A media mañana hemos comprado de camino una garrafa de un licor que hacen ellos, que es bastante flojito de alcohol, y es el único buen recuerdo que me traigo.

La furgoneta no iba demasiado bien. hemos tenido que parar en medio del viaje y el tubo de escape echaba una barbaridad de humo. Me he tapado todo lo que he podido para no tragarme ni ese humo ni el polvo del camino. Pero en cualquier caso hemos llegado completamente negros, incluida yo. Iba tan tapada que en una barrera, de repente se han medio asustando. ¡Aquí hay una blanca! Sí, tranquilos, no voy escondiéndome de nadie. Y cuando hemos llegado a Bata me he ido con una de las chicas por el mercado para comprar una cosa y por la calle le iba gritando la gente qué me habían hecho par ir tan increíblemente sucia (pues los blancos, como buenos colonos, no suelen soportar ciertas incomodidades en el país).

Pero sin duda lo peor ha sido la postura. ¡Me duele tanto el culo y la espalda! Creo que me saldrá un buen moratón. Hemos llegado de noche a la última barrera (donde casi me caigo de espaldas al arrancar el coche) y he pasado los últimos kilómetros cantando lo que se me ocurría intentando no pensar en el dolor. El repertorio ha degenerado tanto, debido a mi nula memoria musical, que he terminado con canciones católicas, para sorpresa general, pues todos son sabedores de mi manifiesto odio y oposición al catolicismo. Pero es que ya no sabía qué hacer. Así que he terminado el viaje cantando en medio de la selva, en noche cerrada, toda sucia y dolorida.

Me voy a la cama. Estoy casi destemplada. Lo único que echo de menos viviendo aquí es el agua caliente y hoy tener que ducharme de noche con el agua helada ha sido horrible. ¡Tenía tanta mugre! Mañana seguro que sigue saliendo polvo cuando me duche pero hoy no aguantaba más frotándome.

Y mañana lunes. Ha valido la pena, pero ahora mismo que nadie me hable de hacer el más mínimo viaje :)

Fotos alojadas en Flickr

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